El efecto del clima sobre nuestro inconciente inmediato es irreparable, pasa de ser la condición forzosa a inventar un juego realmente bueno y desempeñarnos brillantemente en el desarrollo de ideas cada vez más originales por el riego de morir de aburrimiento cuando somos niños, a ser el peligroso día adolescente de doble filo: lado A: día para el amor, disfrutar y regodearse con ello y todo lo que viene junto con la idea en general; lado B: día para deprimirse sin culpa, estar tirado como ameba muerta viendo pasar las santas horas y llorar sin fundamentos apañados simplemente por "el día". O también será ese día en que el adulto acosado por la rutina y las presiones decide tomarse un café y relajarse al rítmo del clima lento y acogedor (o decide querer morir y deprimirse en conjunto a las presiones que ya tenía, ahora sumandole el "no poder parar ni para disfrutar de un cafe con torta viendo la lluvia o para ver una película en la cama").
Como siempre la posta aca la tiene la infancia, y lo que los chicos hacen o hicimos para derrotar el aburrimiento del encierro en los días de lluvia..
Por ejemplo la fija: armar chozas/carpas/casas con sábanas y frazadas en el cuarto o living y jugar sin medida toda la tarde;
A las nenas, cuando nos hartamos de jugar a la oficina o al supermercado, se nos da por cocinar, y en general son tortas. Depende siempre de la presencia de adultos si la torta será exquisita o casera (si mamá no esta PERFECTO guerra de harina azucar y huevo hasta dónde se pueda - o sea: hasta que venga alguien y nos vea-).
También aparecen las cosas 'de mesa' la sal, los juegos: el de la vida, el ludo-matic, monopoly, el juego de la oca♥, pictionary, y los de palabras.
Hablando de mesa otra fija es: que se te ocurra poner art attack o bricolage y te copes haciendo MANUALIDADES toda la tarde. Uno empieza mirando a ver que idea le tira la tele y después va a ver con cuáles elementos cuenta - nunca son los que tienen en el programa - y con ese puñado de cualquier cosa que encontró se dispone a hacer enchastre felizmente y con la responsabilidad del artista, diagramamos recortamos pegamos pintamos amasamos afanosamente para que al final del día nos quede el cerebro fatigado de tanto pensar y una manualidad aforma e inútil que tiene estimado tiempo de vida menor a 1 hr, y lo peor es que después de todo eso hay que limpiar toda la mugre que hicimos - con esto tenemos el día hecho- .
Y si decimos mugre, no olvidamos que los niños varones guardan su energía bardera casi incontenible con un esfuerzo de superhéroes para cuando para de llover -aunque sea por 10 minutos- para salir corriendo desaforados afuera en busca de barro y pelota o barro y arboles de los cuales tirarse cual trampolín y demases cosas que hacen ellos ( y las nenas sienten desde chicas el horrible abandono masculino frente a la libertad del bardo y no pueden creer que hasta hace dos segundos los tenían ahí.. bajo su poder, sentados a tomar el té para ellas solas y ahora por más que les digamos que le vamos a dar toda la torta de chocolate al perro o que les vamos a romper los dibujos de personajes animados que acaban de hacer en dosmil pedacitos.. nos miran con cara de -NI LOCO VUELVO).
Unas tendencias más modernas serían jugar a la play o en la pc hasta que se nos salgan los ojos y los arrastremos sostenidos por los dedos gordos del pié, o bien mirar televisión hasta que nos sintamos estupefactos en una nebulosa de colores.
Lo ULTIMO que un niño debe hacer un día de lluvia es LA TAREA, por que eso no tiene nada de especial.. se hace cualquier día del año (..) - en general las ñiñas son más aplicadas que yo en particular-